Nuestro organismo nos indica que necesita energía y
nutrientes atraves de la sensación de hambre (vacio de estomago), pero a veces,
esta sensación no es por una necesidad real, sino emocional, por ello he
elaborado unas pautas a tener en cuenta si este es tú caso.
El hambre emocional se siente si existe frustración, baja
autoestima, desánimo, estrés o incluso por llevar dietas muy estrictas. Lo
reconocerás si observas que es un deseo fuerte y repentino por alimentos muy
calóricos, y su ingesta a pesar de satisfacerte da paso inmediatamente a la
culpa.
Es importante que sepas que es posible combatirlo, sigue una
dieta equilibrada y rica en alimentos con vitaminas B6, ácido fólico y
triptófano, los cuales favorecen la producción de serotonina , un
neurotransmisor que mantiene el ánimo, toma frutos secos, cereales integrales,
huevos, vegetales de hoja verde, plátanos.
- Identifica las emociones que te empujan a comer y aplácalas, haz algo para mantenerte lejos de la nevera, lee un libro, date un paseo, ir al gimnasio, etc.
- Elige alimentos saciantes para controlar el apetito, que tengan mucha fibra y agua, lo conseguirás si incluyes dos raciones de verduras y tres de frutas.
- No te saltes el desayuno, evitarás sentirte decaída, cansada y hambrienta porque te haya bajado el azúcar.
- No dejes pasar mas de tres horas entre comidas, la sensación de saciedad la envía el cerebro gracias a unos receptores que hay en el estómago, manteniendola activa evitarás el deseo de picoteo.
- Evitarás los bajones si consumes cereales integrales, ya que ayudan a mantener los niveles de energía estables, sobre todo en el desayuno.
- Bebe agua para calmar tu apetito, no aporta calorías y te ayudará a saciarte, toma zumo, infusiones, caldos, etc.
- Organiza tus menús.
- Ponte raciones coherentes.
- Tus platos han de ser atractivos, usa condimentos.
- Duerme bien, hay estudios que avalan que la mala calidad del sueño aumenta el apetito y altera las hormonas que regulan el apetito.
Espero haberte ayudado con estos tips, y que te sean de
utilidad, si quieres ampliar la información puedes leer este otro artículo ¿Realmente tengo hambre?
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